Hoy lunes 8 de junio hemos sido testigos de la lucha que han dado las y los pescadores artesanales de Chile, en el contexto del día internacional de los océanos, en distintas regiones del país, denunciando las maniobras de la industria pesquera que busca apelar en el Tribunal Constitucional (TC), para volver a desarrollar pesca de arrastre en el recurso de la jibia.
Sabemos y reconocemos la incansable lucha que han dado las y los pescadores artesanales, las comunidades de borde mar y las comunidades indígenas por proteger los espacios costeros y marinos de la depredación de la industria extractiva, tanto del mar, donde se han repartido los recursos entre los industriales, a partir de la ley Longueira, como en la industria de tierra, que desde la privatización de los puertos, mega proyectos industriales contaminantes y las inmobiliarias, han afectado las costas de nuestros territorios y sus ecosistemas.
La lucha que hoy están dando las y los pescadores a lo largo de todo Chile y el Wallmapu refleja el agotamiento del modelo extractivista y neoliberal que dio origen a la “rebelión popular” desde octubre de 2019, y que se debe manifestar en el proceso constituyente, con la participación directa de las organizaciones sociales, las comunidades afectadas y los pueblos de todos los territorios. Recuperar el agua, el mar, los ríos, minerales y los bosques es un imperativo histórico y moral, para que sean considerados “bienes comunes” y su acceso un derecho humano, que sirve para la mantención de la vida y el desarrollo integral de los pueblos que habitamos estas tierras y mares.
Desde la Mesa Nacional del Movimiento por la Defensa del Agua, la Tierra y el Medio Ambiente (MODATIMA), junto a todas nuestras compañeras y compañeros en diversos territorios del país, saludamos la incansable lucha que están dando hoy las organizaciones de pescadoras y pescadores artesanales.
Si defendemos el agua, los ríos y el mar, Defendemos la soberanía alimentaria.
Mesa Nacional
MODATIMA