Nos pronunciamos y alzamos la voz, una vez más, porque la situación sanitaria del país ha vuelto a “sobrepasar” los límites “tolerables” y no seremos cómplices de un gobierno negligente, que ha utilizado la pandemia para terminar su periodo de mandato, combinando la represión, la privación de derechos y libertades y puesto por delante las medidas bursátiles por sobre las sanitarias.
Esto lo afirmamos con cifras en mano. Se presenta un alza sostenida de la cantidad de casos confirmados, desde el 19 de febrero del 2021, hemos alcanzado un peak de 9.171 casos el día 9 de abril, superando los 6.938 del 14 de junio del 2020. Con respecto a las muertes, el 12 de Abril hubo 137 fallecidos. Lo que nos acerca, peligrosamente, a las 178 de la primera ola y quedan solo 135 camas UCI disponibles de un total de 4.158 (3,25% disponible) [1].
Más allá de las cifras, existe un insistente mensaje de normalidad, una insólita política de permisos de vacaciones, consistentes con las fechas de los aumentos en los casos diarios, situación advertida por la presidenta del COLMED, Iskia Siches, el día 12 de enero [2]. Tres meses atrás pronosticó las proyecciones de altos contagios (del orden de 6.000) y que alcanzar los 9.000 casos diarios sería una situación catastrófica, si no se tomaban medidas eficaces. La insistencia por parte del ministerio de educación por retornar a las clases presenciales señalando que nuestros niños, niñas y adolescentes no se contagian, fue un fracaso rotundo con 43 colegios cerrados a los tres días del retorno y el aumento de la precarización laboral docente, con un ministro desaparecido del debate público por más de un mes.
Mall y comercios no esenciales abiertos, hacinamiento en el transporte público sin medidas de bioseguridad adecuadas. Estas y otras políticas con escaso fundamento y de constantes vaivenes, viene acompañada de un constante discurso exitista, el mejor ejemplo ha sido el proceso de vacunación y su supuesto alto alcance, con lo que se comunica que tendremos a más del 50% de la población inmunizada, reflejo de una peligrosa ausencia de comunicación de riesgo y educación respecto a las causas de los contagios y su prevención.
Se impone un toque de queda desde las 9 (o 10) de la noche, se restringen los desplazamientos durante el fin de semana, se retoma la cuarentena y se limitan los salvoconductos esenciales, pero el pueblo pobre y sencillo sale a trabajar a diario en transporte público, sufre el hacinamiento en buses y metro, sin aforos ni medidas de bioseguridad. Quienes sufren la precarización laboral trabajando asociados a aplicaciones (Uber, Rappi, Beat, etc) no pueden enfermarse o se quedan sin sustento para el día a día. Los hogares de las mayorías sencillas no tienen el espacio suficiente para afrontar el aislamiento, con altas tasas de hacinamiento, en un país donde el derecho a la vivienda y a una salud digna no existe y solo unos pocos lo pueden comprar.
Todos los salubristas insisten diariamente en el lavado de las manos para impedir el avance del COVID-19 en nuestros territorios, sin embargo, la privatización y mercantilización del agua en Chile, ha colocado una vez más de manifiesto lo criminal del modelo de despojo, ¿alguien piensa que con 50 litros de agua diariamente, vía camiones aljibes, se pueden satisfacer todas las demandas fisiológicas de un ser humano y además lavarse las manos 20 veces durante el día?
La inexistencia de ayudas económicas universales para enfrentar una cuarentena, es decir, una renta básica universal por sobre la línea de la pobreza por cada integrante del núcleo familiar, en un país que tiene una deuda pública bruta del 43% del PIB, con capacidad de endeudamiento al menos del doble y tiene ahorros por cerca de USD$19.000 millones en el FEES (9.000) y el Fondo de Reserva de Pensiones (10.000) [4], si no es momento de gastar y endeudarse ahora ¿Cuando?. Se insiste en la focalización de los recursos en un país con niveles de desempleo sobre el 15% y con la mitad de la población ganando menos de $ 400.000 pesos mensuales.
En un país donde los impuestos son regresivos, es decir, benefician a los más ricos y perjudican a los más pobres. La maquinaria de proyectos «esenciales» extractivistas que ha ingresado al Servicio de Evaluación Ambiental es 2,5 veces los proyectos promedios de años anteriores por montos de inversión 7 veces mayores, intensificando el despojo a las comunidades del agua y la tierra, donde no se paga royalty por la extracción de minerales como cobre y litio. En un país donde el 1% más rico acumula el 25% de la riqueza y el 10% más rico un 66%, en un país donde los súper ricos aumentaron su fortuna en más de un 70%, incluyendo al saqueador más grande de Chile Julio Ponce Lerou y al responsable político de muertes y más de 300 traumas oculares Sebastián Piñera Echeñique. En un país donde el gasto total en pandemia es la mitad del aumento de la fortuna del grupo Luksic durante el mismo periodo. En un país donde el gobierno, liderado por un millonario, se niega a un impuesto a los súper ricos, e impone el poder político, institucional, militar y social para dictarnos como debemos vivir y como algunos deben morir es la Necropolítica en su expresión más brutal y despiadada, en tanto el patrón de acumulación por desposesión y terror se sigue incrementando para los privilegiados de siempre.
En Chile, se utiliza todo el poder político y económico para decirnos cómo vivir y quienes deben morir y nosotr@s respondemos fuerte y claro:
¡BASTA YA!
Nada es más importante que salvaguardar la vida de nuestras comunidades, en el campo y la ciudad, por eso como Movimiento por la Defensa al Acceso al Agua, la Tierra y la Protección del Medio Ambiente MODATIMA, hacemos un llamado al pueblo de Chile a levantarse y decir ¡BASTA YA!.
Es momento de nuevas jornadas de protestas para salvaguardar la vida y que el dinero de este país y las ganancias de unos pocos, que generan los trabajadores y trabajadoras que madrugan día a día vaya en ayuda del pueblo y no a engordar los bolsillos de los súper ricos y de los súper saqueadores.
[1]https://www.gob.cl/coronavirus/cifrasoficiales/
[3]https://www.dw.com/es/chile-tres-d%C3%ADas-de-clases-y-43-colegios-con-casos-de-covid/a-56776786
[4] https://www.instagram.com/tv/CNLybfOJr5A/?utm_source=ig_web_copy_link