Ante los brutales hechos ocurridos el día de ayer 2 de octubre, declaramos:
- Condenamos enérgicamente la acción criminal de carabineros de lanzar al río Mapocho a un niño de 16 años la tarde del viernes 2 de octubre.
- Manifestamos nuestra profunda preocupación por la situación en la que Carabineros viene actuando en las últimas décadas en Chile, contra las mayorías sencillas, los/as jóvenes y contra el pueblo Mapuche, especialmente desde el 18 de octubre en adelante, no solo con fuerza desmedida fuera de todo protocolo que se ajuste al marco democrático, sino también del actuar cómplice y encubridor de sus mandos superiores que, con todas las pruebas y evidencias de las brutalidades cometidas, niegan su responsabilidad como institución de forma sistemática.
- Todo lo anterior se da en el marco de múltiples escándalos de corrupción, desfalcos, encubrimientos y violaciones de derechos humanos perpetradas por esta institución, lo que evidencia una manifiesta decadencia, una alta politización de sus mandos y un deterioro creciente de su relación con la población. Hay que recordar que la sociedad le entrega una parte del monopolio de la fuerza a Carabineros para protegerla, pero esta institución se ha aprovechado de ese mandato, para abusar y utilizar esta misma fuerza en contra de la población.
- Con todo lo anterior, hacemos un llamado a todas las fuerzas políticas y sociales del país para comenzar aquello que la Concertación y la derecha se negaron por 30 años, esto es, comenzar un camino de reforma policial inmediato, que lleve a terminar con Carabineros y crear una policía democrática, subordinada al poder civil, profesionalizada, orientada a la protección de la ciudadanía y no de la propiedad, que ponga en el centro la protección de los derechos humanos y saque el foco del orden público y lo ponga en el resguardo de la población.
- En términos inmediatos, exigimos la renuncia del General Rosas y Víctor Pérez, quienes son los responsables políticos de la situación y han avalado sin cuestionamientos el actuar de carabineros, no estando a la altura de las circunstancias que exige un estado democrático que respeta los derechos humanos. No se puede construir un nuevo pacto social sobre la base de la impunidad.
Modatima Chile
MUy buena declaración, compañeros. Solo agregaría que la policía chilena está institucionalmente vinculada también al narcotráfico y al tráfico de armas hacia el crimen organizado.
Totalmente de acuerdo